La idea no es mala pero tiene ciertos inconvenientes que, entendemos, suponen un obstáculo para su puesta en marcha: la colocación de bancos podria provocar las quejas de los vecinos por ruidos, suciedad, riesgo de botellones etc. Además, estamos hablando de suelo privado de uso público, en la mayoría de los porches existen garajes en el subsuelo con el consiguiente riesgo de filtraciones y finalmente entendemos que los porches son sitios de paso y los bancos están pensados para disfrutarlos al aire libre y con buen tiempo. Argumentos, entiendo, más que razonables para que a día de hoy no nos planteemos llevar a cabo su sugerencia. Gracias, en cualquier caso, por su mensaje. (23/02/2016)